Evidentemente, los VE siguen teniendo un papel importante para ayudar a la transición hacia fuentes de energía renovable. Para muchos posibles compradores, son una opción excelente de transporte local. Sin embargo, la inquietud en torno a la gama de vehículos y la infraestructura de recarga sigue siendo un factor disuasorio.
Con el tiempo, la tecnología resolverá esos problemas. A la larga, las mejoras en los materiales de las baterías y otras tecnologías clave ampliarán la gama de VE. La dotación de mayores infraestructuras para recargar las baterías y la reducción del tiempo necesario para hacerlo harán que la experiencia será muy similar a la de llenar el depósito con combustible. Sin embargo, todavía no hemos llegado a ese punto. ¿Qué significa esto para el sector?
El aumento de la competencia compromete la rentabilidad de los VE
Para ciertos fabricantes de automóviles, creemos que un sector de VE más competitivo probablemente conducirá a una menor rentabilidad, pudiendo incluso generar pérdidas prolongadas en algunos casos. Por ello, los inversores en renta variable deben ser muy selectivos a la hora de invertir en acciones de empresas de automoción cuyo crecimiento de los beneficios se base en ganar más cuota de mercado de VE.
Ahora bien, no creemos que este obstáculo erosione el potencial del mercado de VE a largo plazo. Creemos que para que los inversores en renta variable aprovechen la oportunidad de los VE es fundamental invertir en empresas que participan en el desarrollo tecnológico para el sector, también conocidos como proveedores «de pico y pala».
Recarga y autonomía: superar las barreras para la adopción de VE
Analicemos la infraestructura de recarga. Los conductores de VE necesitan más puntos de recarga, pero también tener confianza en su funcionalidad. Eaton es un fabricante de equipamiento eléctrico que, a nuestro juicio, tendrá un papel fundamental en la ampliación de la infraestructura de recarga en Estados Unidos. Dado que el gobierno estadounidense ha asignado un presupuesto importante para dotar de infraestructuras de recarga de VE mediante la Ley de reducción de la inflación, creemos que este segmento del sector debería contar con un sólido respaldo estructural en los próximos años.
¿Y qué hay de la preocupación por la autonomía? Las posibles soluciones llegan a través de los materiales de las baterías, los híbridos, las nuevas tecnologías y las mejoras en los sistemas actuales. Aptiv, grupo irlandés y estadounidense de tecnología para la automoción, probablemente será un proveedor fundamental para muchas de estas mejoras. Los vehículos eléctricos e híbridos incluyen una cantidad significativamente mayor de componentes producidos por empresas como Aptiv en comparación con los vehículos con motores de combustión interna. Por otra parte, unos sistemas de automoción más inteligentes deberían impulsar la demanda de todo tipo de equipamiento electrónico. Amphenol, que fabrica sensores y conectores para productos de automoción y que abastece a muchos otros sectores, probablemente experimentará un incremento de la demanda.
No hay que confundir la competencia con la falta de demanda
Fuera de Estados Unidos, el tema de los VE está cambiando de distinta manera, sobre todo en China. Según BloombergNEF, en el cuarto trimestre de 2023, los VE representaron el 8,1% de las ventas de vehículos en EE. UU., frente a casi un 80% del total en Noruega, un 35% en los Países Bajos, un 24% en China, un 20% en Alemania y un 18% en el Reino Unido.
Estas cifras demuestran que se está produciendo la adopción de VE por parte de los consumidores, incluso cuando la competencia está redefiniendo el mercado. La china BYD ha adelantado a Tesla como principal fabricante mundial de VE por volumen, según los informes de la empresa. Asimismo, decenas de fabricantes chinos más pequeños de VE se afanan en ganar cuota de mercado. En esta etapa de desarrollo del mercado, creemos que es muy difícil determinar qué fabricantes de vehículos eléctricos se situarán a la cabeza, sobre todo por las dificultades para predecir qué operadores nuevos conseguirán penetrar con éxito en los mercados de Europa, América Latina y Norteamérica.
Aunque la gama de precios y prestaciones de los VE es muy amplia, todos estos vehículos tienen algo en común: muchos de los componentes eléctricos que utilizan son similares. En consecuencia creemos que los proveedores «de pico y pala» están mejor posicionados para ofrecer un crecimiento de los beneficios con los VE que los fabricantes de automóviles globales.
El entusiasmo por las nuevas tecnologías —desde la IA hasta los VE— suele generar mucha emoción entre los inversores en renta variable. Sin embargo, para acceder a las oportunidades de renta variable en sectores en proceso de evolución es necesario un análisis sereno de las dinámicas de dichos sectores y la calidad del negocio, que determinarán el poder de generación de beneficios a largo plazo.